BENTLEY CELEBRA UN AÑO DE REDUCCIÓN DE EMISIONES

Gracias a la instalación de un depósito de 34.000 litros y una bomba de biocombustible en la propia empresa, se ha ahorrado la emisión de 233 toneladas de CO2 en tan sólo 12 meses. Como resultado de esta iniciativa, Bentley puede ahora hacer funcionar su flota logística interna con un 100 % de energía verde.

El biocombustible "Green D+" se fabrica a partir de aceite vegetal desechado tratado con hidrógeno (HVO), un combustible sin fósiles alternativo al gasóleo que refina productos renovables y sostenibles como grasas, vegetales y aceite reciclado. En la actualidad, el biocombustible alimenta quince camiones que transportan piezas entre Crewe y un almacén de la empresa en Winsford, además de otras 20 furgonetas más pequeñas y vehículos de seguridad.

Los vehículos de logística de Bentley han utilizado más de 100.000 litros de este combustible basado en residuos desde que se instalaron el nuevo depósito y la bomba a finales de noviembre de 2020 y ha permitido renovar la certificación PAS 2060 Carbon Neutral para la mayor factoría de la marca.

Junto con el esquema de biocombustible HVO, las más de 250 carretillas elevadoras de Bentley y los motores de remolque utilizados dentro de la propia fábrica también se están cargando con electricidad verde, gran parte de ella procedente de los 30.000 paneles solares de Bentley.

Estos proyectos forman parte de la estrategia pionera Beyond100 de Bentley, cuyo objetivo es convertir a la empresa en líder mundial de la movilidad de lujo sostenible.